Posted by El ganador del Tour de Francia, Tadej Pogačar (UAE Team Emirates) mostró su clase para tomar la primera meta en la cima de Tirreno-Adriatico en Prati di Tivo, aguantando una persecución animada de Simon Yates (Team BikeExchange) por seis segundos.
Sergio Higuita (EF Education-Nippo) superó a Mikel Landa (Bahrain Victorious) por el tercer lugar a los 29 segundos.
El líder de la carrera nocturna, Wout van Aert (Jumbo-Visma), defendió enérgicamente el maillot azul, pero quedó aislado y sucumbió a múltiples ataques en el último kilómetro, terminando 45 segundos menos y cediendo el primer puesto de la clasificación a Pogačar.
Sin embargo, no todo está perdido para el belga, ya que permanece segundo en la general a los 35 segundos con Higuita empatado a tiempo en el tercer lugar.
La subida final vio a los rivales anteriores Mathieu van der Poel (Alpecin-Fenix) y Julian Alaphilippe (Deceuninck-Quickstep) caer en picado en la clasificación, con el campeón holandés sentado temprano en el ascenso y el campeón mundial aguantando hasta que Pogačar lanzó su movimiento con Aún quedan 5,5 km por escalar.
Un aislado Van Aert resistió múltiples ataques en la escalada de 14 km de un grupo de élite de contendientes del Grand Tour, teniendo que responder a las oleadas de especialistas en escalada como Giulio Ciccone (Trek-Segafredo) y los ganadores del Tour de Francia Egan Bernal y Geraint Thomas (Ineos Granaderos)
No fue hasta que el campeón del Tour del año pasado, Pogačar, atacó cuando faltaban 5,5 km para el final, que el elástico finalmente se rompió y el joven de 22 años saltó. El movimiento permitió que Van Aert finalmente se sentara mientras sus compañeros de persecución reconocían el peligro y comenzaban a perseguirlo.
João Almeida (Deceuninck-Quickstep) fue el primero en dar la vuelta, pero no fue rival para un poderoso contraataque de Yates, Landa y Bernal y el piloto portugués se vio obligado a perseguir junto a Higuita y Nairo Quintana (Arkéa-Samsic).
Van Aert encontró su segundo aire y, cuando Yates atacó para deshacerse de Landa y Bernal, el piloto de Jumbo-Visma trajo a todos menos a Pogačar y Yates y estableció un ritmo tan rápido que Bernal y Thomas perdieron el contacto.
En el último kilómetro parecía que Pogačar podría haber ido demasiado rápido demasiado pronto, ya que Yates redujo una brecha de 17 segundos a solo seis en la línea, pero el británico se salió de la carretera y tuvo que conformarse con el segundo.
Pogačar ahora tiene una etapa de estilo Clásicos y un día plano para que los velocistas vengan antes de la contrarreloj de cierre del martes.
«Hoy ha sido una etapa muy dura. Mi equipo hizo un gran trabajo reduciendo la brecha desde la escapada y luego hice mi mejor esfuerzo en la subida: estoy muy satisfecho con esta victoria», dijo Pogačar.
«Ahora estoy a la cabeza, pero mañana tenemos otra etapa realmente difícil, y con el ITT final todavía puede pasar cualquier cosa».
Si bien las brechas en la clasificación general son aún lo suficientemente pequeñas como para que las esperanzas de Van Aert de ganar la clasificación general no se hayan esfumado por completo, recuperar 35 segundos en Pogačar será una tarea difícil.
«Es una gran brecha», dijo Van Aert. «Las próximas etapas deberían estar sobre mí y definitivamente no me voy a rendir todavía. Creo que tiene un sentido particular mirar hacia arriba y aprovechar las oportunidades que surjan. Voy a seguir intentándolo de todos modos».
«Pogacar, junto con mi compañero Primoz Roglic, es el mejor todoterreno del momento. Es lógico que se haga cargo de mi camiseta».
La etapa 4 de Tirreno-Adriatico se puso en marcha bajo un cielo soleado y con unas deliciosas temperaturas primaverales de 19 ° C en Terni para una etapa de 148 km hasta el enfrentamiento de la cumbre en Prati di Tivo. 170 pilotos tomaron la salida, con solo Manuel Belletti (Eolo-Kometa) ausente tras sufrir una caída al final de la etapa anterior.
El líder de la carrera, Van Aert, tenía una ligera ventaja de cuatro segundos sobre Van der Poel, con Alaphilippe a 10 segundos. El belga enfrentó su primer gran desafío contra contendientes de carrera por etapas más experimentados, con Landa cuarto a los 19 segundos y un montón de grandes nombres a los 20 segundos: Pogačar, Quintana, Vincenzo Nibali (Trek-Segafredo) y Romain Bardet (Team DSM). .
Los primeros kilómetros fueron dominio de los cazadores de etapas y los ciclistas con ambiciones de la clasificación de montaña, y Mattia Bais (Androni Giocattoli-Sidermec) y Mads Würtz Schmidt (Israel Start-Up Nation) fueron los primeros en saltar. Benjamin Thomas (Groupama-FDJ) y Emil Vinjebo (Team Qhubeka Assos) se cruzaron, pero pronto Vinjebo perdió el contacto y estaba persiguiendo a Marco Canola (Gazprom-RusVelo).
En el valle, después de unos 35 km de carrera, los corredores se unieron y forjaron una ventaja considerable sobre el pelotón, con la brecha aumentando de seis a casi nueve minutos después de 48 km. La escapada funcionó bien en conjunto hasta la primera ascensión clasificada del Passo delle Capannelle, donde primero Vinjebo y luego Canola perdieron el contacto, dejando a tres corredores para intentar contener al pelotón, liderado por Bahrain Victorious.
Würtz era el piloto con más ganas de atacar y se adelantó, pero Thomas y Bais regresaron. Todo eso cambió cuando llegaron a la base del Prati di Tivo, donde Thomas atacó y fue marcado por Würtz mientras Bais bajaba. Vinjebo y Canola fueron atrapados por el pelotón que había reducido la brecha a solo tres minutos.
Würtz luego atacó para dejar atrás a Thomas y siguió presionando mientras el pelotón liderado por Ineos Grenadiers comenzó a encogerse rápidamente. Van der Poel parecía completamente desinteresado en disputar un gran final de montaña y salió por la parte trasera al principio de la escalada. Giulio Ciccone (Trek-Segafredo) salió por el otro extremo, haciendo un ataque de largo alcance con 11 km aún por subir.
El pelotón mantuvo a Ciccone bajo control y pronto estuvo de regreso en el redil, sin haber obtenido más de una docena de segundos. Würtz siguió adelante con 2:30 cuando Egan Bernal atacó con 7,8 km para escalar. El ataque atrajo a Pogacar, Jakob Fuglsang (Astana-Premier Tech) y Landa, pero Van Aert cerró el ataque por su cuenta, todos sus compañeros de equipo Jumbo-Visma se fueron.
La oleada quitó un minuto de ventaja a Würtz cuando Geraint Thomas primero intentó contraatacar y, cuando falló, se quedó en la parte delantera para detener un ataque de João Almeida (Deceuninck-QuickStep).
Thomas lo intentó de nuevo con 6,8 km para el final y Van Aert nuevamente se encargó de marcar el ritmo. El piloto de Ineos pasó a su homónimo francés que regresaba de la escapada y redujo Würtz a solo un minuto de ventaja con 6 km por subir, pero el estilo de pedaleo del ex ganador del Tour de Francia parecía laborioso y colgaba tentadoramente por delante del grupo de maillots azules, un poco de cebo. Eso resultó irresistible para Pogačar, que atacó con 5,5 km para el final y rápidamente alcanzó al galés.
Con 5 km para el final, Pogačar atrapó a Würtz y dejó atrás a Geraint Thomas y comenzó una persecución individual de 4,7 km: el campeón defensor del Tour de Francia contra el líder de la carrera Van Aert, cuyo esfuerzo en solitario atrapó a Thomas y arrojó a corredores como Nibali.
Finalmente, a 4km del final, Bernal atacó y fue seguido por Landa y Simon Yates, seguido de Almeida, Quintana e Higuita.
Yates atacó a su grupo y salió en persecución de Pogačar, que tenía 11 segundos con 2.6 km para el final, mientras que detrás, el ritmo constante de Van Aert trajo de vuelta a todos los demás pilotos por delante.
Con 2,3 km para el final, Pogačar miró hacia atrás para ver venir al británico y aceleró su ritmo. Detrás, Van Aert mantuvo la brecha a medio minuto y su impresionante esfuerzo distanció a otro ganador del Tour de Francia: después de deshacerse de Nibali y Thomas, Bernal fue el siguiente en perder el toque. Pronto Pogačar comenzó a sucumbir al ritmo de Yates, una mueca inusual en el rostro del joven esloveno a 1 km del final.
Pero Pogačar mostró su clase y mantuvo a raya a Yates para reclamar la victoria de etapa y el liderato de la carrera.
Van Aert dijo que la última subida le fue bien, pero que el viento facilitó el ataque de otros.
«Realmente tuve que rodar cinco kilómetros en mi límite», dijo Van Aert. «Había mucho viento y eso hace que sea más fácil atacar. Si no estuviera usando esa camiseta azul, podría salvarme para el tiro final. Ese no era el caso ahora. Había algunos muchachos mejores y mucho de los chicos me desafiaban. Podían esperar y ver, yo no podía «.