Kwiatkowski rompe “maldición” del maillot arcoíris y vence en la Amstel Gold Race

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Tras un deslucido rendimiento en el pave el Etixx Quick se lleva la 1ª del tríptico de las Ardenas


El ciclista Michael Kwiatkowski (Etixx Quick Step) ha demostrado que no existe tal maldición del maillot arcoíris venciendo en un embalaje de unos pocos ciclistas a Alejandro Valverde (Movistar), Michael Mathews (Orica Green Edge) y Rui Costa (Lampre).

Así terminó la clásica de la cerveza que parecía definida entre 2 potentes ciclistas, Gilbert y Mathews, sin embargo Valverde apareció cerrando ese hueco a falta de 1 kilómetro llevándose unos pocos ciclistas a sus espaldas para definirlo todo en un cerrado embalaje.

 

La 1ª del tríptico de las Ardenas inició con una fuga en el kilómetro 33 integrada por De Vreese (Astana), Jan Polanc (Lampre), Timo Roosen (Lotto Jumbo), Linus Gerdemann (Cult Energy), Johann Van Zyl (MTN Qhubeka) y Mike Terpstra (Roompton) que alcanzaron los 7 minutos al pasar el Cauberg por primera vez.

Los fugados alcanzaban una diferencia de 9 minutos y por detrás empezaron a tirar los Bmc y Movistar reduciendo la diferencia a 6 minutos, en colaboración entraría el Orica Green Edge para bajar a 1 minuto la ventaja a falta de 51 kilómetros.

A 38 kilómetros para el final, el Ettix, Astana, Bmc y Cannondale empezaron a jugar sus cartas picando por delante con Tony Martin, Vicenzo Nibali, Diego Rosa, Damiano Caruso y Howes que tomaron una diferencia de 38 segundos.

El lote no se podía relajar teniendo a Martín y Nibali en punta, sin dudas corredores peligrosos que en cualquier momento podrían abrir un hueco más grande, y así lo entendió el Movistar que empezó a tirar con el Tinkoff.

Pocos soldados el quedaban a la fuga inicial, Tanner y Clarke eran alcanzados por el grupo de Nibali y Martin,  con la carrera ya lanzada en los últimos 20 kilómetros empezaron a ceder terreno ante un lote que venía al mando del Movistar.

La distancia se reducía mientras Martín, Nibali y Clarke no se resignaban a morir, el tiburón de Mesina en la cima del Geulhemmerberg sacaba coraje, pero Clarke no brindaba su colaboración, así lo entendieron Martín y Nibali que levantaron el pie del acelerador y dejaron ir a Clark, mientras el lote les alcanzaba.

El australiano cruzó el Bemelerberg a falta de 8 kilómetros para la meta pero el lote lo eliminó, un nuevo latigazo de Jacob Fulgsang (Astana) sería respondido por Greg Van Avermaet (Bmc) tomando una renta de 8 segundos para enfrentar la cima del Cauberg por última vez.

Bjorn Leukemans (Wanty) les facilitó el trabajo llevando su rueda a Ben Hermans (Bmc) y alcanzando a los 2 ciclistas que estaban en punta, el Orica puso un paso endemoniado y empezó a tirar en los últimos 3 kilómetros.

El Bmc volvió a jugar sus posibilidades otra vez con Hermans marcando el paso de Gilbert que atacó a falta de 1.5 kilómetros con vehemencia y a pulso con Mathews, codo a codo se daba una cerrada lucha entre estos 2 pedalistas, pero llegó Valverde y les acabó la celebración.

El movimiento de Valverde fue marcado por varios ciclistas para llegar al embalaje con posibilidades y el campeón del mundo Kwiatkowski para levantar los brazos.