El español del Movistar Team, Alejandro Valverde, fue muy analítico tras llegar segundo en la etapa quince (15) del Tour de Francia en Andorra, detrás del estadounidense, Sepp Kuss.
Valverde pudo tener su gran día por el tipo de terreno en que se rodó pero le faltaron fuerzas al final para vencer a Kuss que estaba corriendo en su patio, pues ahí entrena el norteamericano.
«Hoy (domingo) teníamos un poquito más de libertad, podíamos ir a la fuga y eso es lo que he hecho. Una vez ahí, intentar ganar, pero siempre es complicado rematar una fuga así. Bien por hacer 2º, pero habría sido mejor ganar»; comentó Alejandro.
«Con el ataque de Kuss se ha hecho muy duro, y recortar esos 15-20” ya era complicadísimo. Él se conoce Beixalis al dedillo, tanto la subida como la bajada, y lo ha hecho a la perfección. Yo me he visto apuro en un par de curvas de la bajada y he pensado que es importante ganar, pero es más importante no caerse”, confesó.
Valverde lo tenía clarísimo, quería ganar pero le quedan cinco etapas muy importantes y no quería verse afectado.
«En una bajada así, te puedes hacer mucho daño. Por lo demás, contento con que Enric siga ahí; quedan todos los Pirineos por delante. Creo que como equipo lo estamos haciendo bien, más allá de la mala suerte de no poder tener aquí a Soler tras su caída del primer día. En lo personal, hay que estar contentos hasta el momento. Fue una pena cuando tuve que pararme en aquella etapa cuando iba escapado, con casi 4’, por ir congelado, y tener que pararme en la orilla y no poder pelear, pero así es este deporte. Seguiremos luchando hasta el final, todo el equipo, para dar alegrías”, argumentó.