Las historias que lo convirtieron en leyenda, Gracias Bonilla

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FOTOGRACIAS TOMADAS DE EVER OBANDO Y DEL FACEBOOK DE JOSE ADRIAN BONILLA

Hoy con la nota que publicó nuestra colega Fanny Tayver ponemos la cinta del caset a retroceder con este personaje, las historias la mayoria que estamos en este deporte las conocemos mínimo las han escuchado en algún momento, pero esas historias cuando pasa el tiempo y perduran y la gente sigue hablando y las comentan a pesar del tiempo que ha transcurrido es cuando se esta frente a una leyenda.

La primera vez que lo vimos fue para enero de 1994, Juegos Nacionales de Santa Cruz. Un prejuvenil debutada en esa vitrina de las justas  con dos medallas de plata, a primera vista nada fuera de lo normal, sin valorar que eran sus primeras justas frente otros ciclistas que ya tenían proceso.

 

Ya destaca por su elegancia en la bicicleta, cuando  se preguntaba por los antecedentes de ese joven paraiseño se le referenciaba por su padre: José Bonilla, el gregario de lujo de Jose Manuel Soto en la década de los 70.

Pero José Adrián Bonilla “champu” se iba a desmarcar rápidamente de su padre, y  para los juegos nacionales de Turrialba y Desamparados se convirtió en la figura más destaca en el ciclismo ganando todo lo que disputó y siendo declarado en los dos años consecutivos como el mejor atleta.

La experiencia siempre marca que lo que brilla de joven no siempre perdura para el alto rendimiento, pero José Adrian Bonilla iba a escribir sus páginas , y las empezó desde abajo cuando el equipo de Pizza Hut lo llevo como utilero, y ayudante en mecánica, me parece aun estarlo viéndo en 1996 en el cajón del pick up subiendo y bajando cosas aprendiendo a cuidar los detalles de cómo se prepara una Vuelta. Llegó el 97 y su debut en la vuelta ganando la camiseta azul de debutante.

El 98 su escuadra del momento no participó en esa vuelta. Y para el 99 escribió la primera de sus historias que aun hoy se cuentan año tras año y parece que son  esos momentos que van perduran en la memoria  para siempre: última etapa de Pérez Zeledón- San José, Bonilla coronó el Cerro con más de cinco minutos de retraso ante el líder Miguel Arroyo el mexicano, pero Bonilla nos presentó ese día uno de sus grandes recursos en el ciclismo, su capacidad de dominar el descenso  con una agilidad pasmosa y nervios de acero para no cometer el mínimo error, en esa mañana de lluvia que ponía mucho más complicado el bajar. Bonilla conectó con Arroyo y lo paso de largo. Lico  Ramírez  le logro seguir la rueda a Bonilla. Ambos  cortaron cada curva, aceleraban en cada largada. La etapa terminó y a Bonilla le faltaron menos de 20 segundos para convertirse en el campeón. Fue una etapa épica.

Dentro de la lluvia de recuerdos que nos queda hay dos para la historia. La primera en el 98 Jose Adrian se presentaba en el ciclismo de montaña para un panamericano en Toluca, México. La historia presentaba a todos los mexicanos alabando a su principal figura Ziranda Madrigal, Bonilla con su debut en su categoría no era para nada el favorito apenas y lo conocían, pero la clase brilla donde sea; apenas en la segunda vuelta los periodistas mexicanos se quedaban con la boca abierta en la sala de prensa siendo testigos como un desconocido les robaba el oro panamericano, lo mismo ocurrió al año siguiente en Manizales con una lluvia incomoda también sería el campeón.

Y la segunda, fue aun mejor para mi gusto por la tierra donde se disputó ese panamericano; Colombia. Ese panamericano de  Medellín que era clasficatorio para los Olímpicos de Atenas, se corrió bajo  una mañana horrible, todo estaba  gris, llovía a cantaros; los colombianos como es normal sacaban a relucir todo y sus medios de comunicación RCN y Caracol  alabando a sus hombres daban por sentenciado que la plaza directa iba a ser solo para Colombia. Que gran mañana nunca voy a olvidar las caras de los comentaristas como HEctor Urrego y los narradores cuando los dos únicos costarricenses José Adrian Bonilla y Federico Ramírez dominaron el  barro , el descenso técnico de esa pista y vuelta tras vuelta al grupo de ticos que estabamos ahí  se nos hinchaba el pecho, ese parque donde estaba ubicada la pista se silenció, nadie podía creer que dos ticos les quitaran su clasificación para los olímpicos era imposible. Costa Rica lucia el oro con Bonilla y la plata con Lico. Fue una mañana de lujo, de ciclismo puro, de destreza absoluta. Ese día la América del ciclismo de montaña conoció a los nuevos herederos del trono que recién había dejado Andrés Brenes.

Las historias son muchas cada quien podría aportar hojas y hojas para completar varios tomos de un mismo personajes pasando por sus Títulos de Tour de las Rocayosas, Norba  Copas del Mundo, sus campeonatos nacionales de CRI, y obviamente sus dos Vueltas a Costa Rica.

En esta lluvia de algunas buenas que me quedan en la retina fue su última medalla de oro con selección  fue en su gran especialidad la crono individual la que siempre preparo con tanto cuidado en los Juegos Centroamericanos de Panama.

Que es de carácter fuerte,  nadie de los que estamos en el ciclismo lo podemos negar, lo tiene y mucho, pero es el carácter que necesitan los que quieren triunfarEse carácter y mentalidad que lo llevo a Europa a ser contratado por el histórico Kelme  y dejar el legado que hoy se llama Andrey Amador.

Para nuestro gusto en CRCICLISMO se adelantó en su retiro, el frio de su equipo durante la Vuelta no paso por las cobijas de Bonilla.

Pero hoy ya convertido en el director técnico de la escuadra del Coopenae Economy Movistar creo que este equipo  tiene al frente al hombre que puede golpear la mesa y mirar de frente a cualquier corredor y exigirles más. Y a los jóvenes prospectos enseñarles que las cosas se ganan con coraje y esfuerzo, tal y como paso en cada carrera donde no se partía como favorito y al final ganaba silenciando a propios y extraños.

Para muchos un terco y necio en el cuido de detalles a la hora de preparar cada carrera, como lo hacia preparando su tan apresida especialidad la crono individual, este sistema  le hizo en ocasiones  ganar y en  otras tantas igual perder  pero no se apartaba de su guión. Cuidar cada detalle, como al final siempre nos decía «estoy cuidando cada detalle».

Gracias  “champu” una leyenda del ciclismo que pudimos ver en acción.

FOTOGRACIAS TOMADAS DE EVER OBANDO Y DEL FACEBOOK DE JOSE ADRIAN BONILLA