La temporada sobre el pave llega a su fin mañana con la edición 115 de la París Roubaix y de la misma manera el pedalista Tom Boonen (Quick Step Floors), una de las leyendas de este monumento se despide del ciclismo profesional con 4 victorias en su palmares y la posibilidad de colocar su nombre como el más ganador del infierno del norte si llega a lograr su 5º triunfo.
Serán 257 kilómetros con 29 sectores de empedrado que martillaran las piernas de los ciclistas donde parten como favoritos un cuadro de 7 corredores, entre ellos Peter Sagan, Alexander Kristoff, Greg Van Avermaet, John Degenkolb, Oliver Naesen, Arnaud Demare y el “Dream Team” del pave capitaneado por Tom Boonen.
El Quick Step Floors tratará de romper la historia con Tom Boonen aprovechando toda la experiencia de Tommeke, hombre de mil batallas en el infierno del norte que llevará a sus espaldas la fortaleza que le puede brindar un cuadro integrado por Iljo Keisse, Zdenek Stybar, Tim DeClercq, Julien Vermote, Nikki Terpstra y Matteo Trentin.
Del italiano Trentin sabemos que es un hombre de garantía y determinante cuando tiene que prender la máquina para cortar el lote, de Stybar su paso por el Ciclo Cross le ha llevado a tenérsele en cuenta para las instancias decisivas tal y como lo hizo en el 2015 donde Degenkolb le arrebató la victoria en Roubaix, mientras Terpstra las credenciales de ganar en el infierno del norte en el 2014 e inteligencia y piernas para meterse en ese selecto grupo, aunque a veces falla en las decisiones finales.
Pero vamos a darle todos los créditos a Tom Boonen por la fortaleza que le caracteriza cuando se trata de enfrentar los tramos de adoquín, sus 4 victorias en sus espaldas y su experiencia, nadie más como él sabe cuándo hay que atacar, para no ir muy lejos el fin de semana pasado en Flandes su latigazo a 92 kilómetros de la línea de meta en el Kamelmuur prácticamente sello la victoria dejando cortados a Van Avermaet y Sagan.
Otro de los encopetados que luchará por la victoria es Peter Sagan (Bora Hangrohe) un ciclista dotado físicamente por violentos cambios de ritmo con mucha potencia que ha fallado en su colocación en Flandes, el cual tiene mucho por aprender y seguramente estará con las alertas prendidas a cualquier movimiento del Quick Step Floors, equipo que seguramente controlará la carrera.
De llegar en un grupo de corredores donde la presencia donde la ausencia de Degenlkolb, Demare y Kristoff sea visible seguramente inscribirá su nombre en la París Roubaix, aunque las únicas dudas que se levanta sobre Peto es su equipo y sus fallas en los últimos embalajes, en Milán San Remo perdió con Kwiatkowski, mientras en el Omloop Het Niewsblad con Van Avermaet solo llegando a ser vencedor en la Kuurne Bruselas Kuurne.
El belga Greg Van Avermaet (Bmc) es otro de los pedalistas opcionados que lo ha ganado casi todo en esta temporada llevándose E3 Harelbeke, la Gante Wevelgem y el Omloop Het Niewsblad carreras en donde venció a Philippe Gilbert, Jens keukeleire y a Peter Sagan respectivamente.
Sin dudas, un pedalista que viene con sed de llevarse una grande con un estado de forma envidiable como en Flandes, viéndose involucrado en la caída y saliendo a por los pedalistas que le habían sobrepasado para quedarse con la 2ª posición en De Ronde Vlaanderen.
La presencia de John Degenkolb (Trek Segafredo) es amenazante teniendo en cuenta que en el 2015 batió a Stybar en el velódromo de Roubaix, aunque no llega con los mejores resultados esta temporada siendo 5º en la Gante Wevelgem Y 13 en la E3 Harelbeke.
Además de un potente equipo con la presencia de grandes rodadores como el suizo Mathias Brandle y un musculoso clasicomano como Jaspe Stuyven que ha estado muy activo en las semiclasicas belgas que cuando se trata de colocar a sus compañeros hace su mejor trabajo.
Una carta que se destapo este año es el ciclista belga Oliver Naesen (Ag2r) que en Flandes resistió las embestidas de Sagan y Van Avermaet, para pegarles a ruedas donde solo la ciada de Sagan pudo dañarle la gran carrera que estaba haciendo.
El de 26 años que paso de las filas del desaparecido Iam Cycling al Ag2r viene de fraguar una buena actuación en la edición 114 de la Paris Roubaix, capaz de codearse con Van Avermaet y Gilbert en E3 Harelbeke entrando 3º hasta llegar 7º en el Omloop Het Niewsblad de la presente temporada, lo hacen acreedor para tomársele como uno de los favoritos a llevarse la Paris Roubaix, pero que su escasa experiencia en las definiciones le pueden pasar la factura.
Para finalizar nuestro cuadro de aspirantes a llevarse el Infierno del Norte la presencia de Alexander Kristoff (Katusha) apoyado de la locomotora Tony Martin Y Reto Hollenstein que sin dudas lo guiaran por esos 29 tramos de pave.
Quizás no ha contado con la suerte necesaria en las semiclasicas belgas donde las caídas lo han alejado de las primeras como en el Omloop Het Niewsblad, pero ha demostrado que está vigente entrando 4º en la Milan San Remo y 5º en el De Ronde Vlaanderen, ganando los embalajes en cada uno de los grupos de persecución de cada una de estas carreras, por lo que se concluye que si llega en un grupo numeroso será difícil batirle.
El último favorito a considerársele es Arnaud Demare (Fdj) por su potente golpe de pedal y cierre, además porque cuenta con un bloque solido de mucha experiencia en el pave y sobretodo que las dificultades del infierno para un ciclista acostumbrado a desenvolverse en las clásicas sobre el pave no debería ser factor determinante a menos que sufra alguna avería mecánica o que su equipo no resista el ritmo de los equipos a dominar la competencia.
De atrás y rescatando la importancia de sus últimas participaciones no debemos olvidar a Mathew Hayman (Orica Scott) ganador de la Paris Roubaix 2016 que no viene realizando una buena temporada en el pave, pero no se descarta la posibilidad que se ilumine y llegue a disputar los puestos de honor.
Entre los 29 tramos más importantes se destacan Trouée d’Arenberg cuya longitud llega a los 2.4 kilómetros de adoquinado, cuando la carrera llegue a los 161 kilómetros de recorrido, el tramo Mons-en-Pévèle el más largo con una longitud de 3 kms, allí después de los 208 kms de recorrido y el Carrefour de l’Arbre de 2.1 kms a 17 kilómetros de la meta.