Podría llamarse un nuevo comienzo, una nueva oportunidad. Eso fue lo que tuvo Henry Raabe, ciclista del Coopenae Economy Gallo, luego de regresar de forma oficial a su pasión, con la Clásica Palmarín, que se realizó este sábado.
El brumoso no competía desde abril del 2012 cuando se desarrolló la Copa Columbia, debido a un cáncer linfático que ha podido vencer.
Después de completar el recorrido de 33 kilómetros, Raabe fue recibido por una lluvia de aplausos por parte de sus amigos, compañeros y público en general, luego de entrar en el puesto once.
Pero más allá de una posición, “El cañonero del Irazú” ha dado una muestra de lucha, y amor por lo que hace.
“Estoy muy contento, después de bastante tiempo de estar fuera inicié el a;o con una gran carrera, gracias a Dios me sentí bien, me mantuve lo mejor que pude hasta que no podía darle más y empecé a disfrutarlo tranquilamente”, comentó el pedalista al finalizar la competencia.
Su propósito es claro, ir mejorando el nivel hasta cerrar con la Vuelta a Costa Rica 2013.
“Yo sé que había secciones que no podía más, es parte del sufrir, y es eso al final lo que me va ayudar para llegar bien a final de la temporada”.
Raabe por último recordó que cuando le dieron la noticia del cáncer, por momentos pensó que iba a ser de su carrera como deportista.
“Al inicio fue difícil porque pensé qué podía ser de mi con el ciclismo, pero aquí estamos luchando y por dicha la bici es parte de mi recuperación”, finalizó.
Por su parte, su gran amigo Paulo Vargas, de BCR Pizza Hut no dudó en dedicarle la carrera a Raabe y resaltó la gallardía de quien en algún momento fue su compañero de equipo.
“Él es mi motivación para seguir adelante, quiero dedicarle esta carrera. Él me hace ver que mis problemas son muy pequeños, comparado a todo lo que ha tenido que pasar”.