Posted by Diyer Rincón el ciclista colombiano que corre en nuestro país con la escuadra de Asfaltos CBZ-7C-Economy-Wilier conversó con Cr Ciclismo sobre su inicio en el deporte, su lado más humano y sus sueños a corto plazo.
El cafetero inicio en el ciclismo en su natal Zipaquirá donde hoy está con su familia, tras la pandemia del Covid-19.
«Mis papás fueron ciclistas recreativos y por ellos me vinculé al ciclismo. Antes no me gustaba, lloraba cuando tenía que salir a pedalear, empecé como todo ciclista profesional. Una bicicleta muy básica, marco de aluminio, sin suspensión y frenos de herradura.»
El colombiano además comentó que poco a poco se fueron dando los resultados y que a los 14 años comenzó a competir a nivel nacional.
«Pasado el tiempo le encontré el amor a la bicicleta; cuando comencé a conocer amigos, viajar a las copas nacionales y empezar a dar buenas carreras; de cierto modo siendo novato se va escalando gradualmente.»
El oriundo de Zipaquirá fue amante del ciclismo de ruta, sin embargo el poco apoyo económico, lo hizo enamorarse del mtb, que a la fecha sigue practicando.
«Siempre he hecho carreras de ruta, la más grande fue el Clásico RCN y pues de todo corrí, pero en ese tiempo no había mucho sustento económico para mantenerse ahí. En la bici de montaña tenía algo más, peleaba todas la carreras y comencé a tener apoyo económico de equipos de montaña, entonces decidí mantenerme en el mtb.»
Su llegada a Costa Rica se dio gracias a una participación en el Guanaride con el desaparecido equipo constructora Arpo.
«Corrí Guanaride y el dueño del equipo me llevo a la Conquistadores y a una fecha de la Endurance UCI. Me empezó a ir bien y en el 2015 me ofreció estar toda la temporada.»
Para Rincón el dejar Colombia para venirse a un país que no conocía y donde no tenía amigos, fue algo que por momentos lo hizo dudar.
«Eran muchos cambios, ir a un nuevo país qué no conocía. Fue una travesía arriesgada pero le doy las gracias a Dios porque valió la pena y he conseguido muchas cosas; además conocí un país y gente amable, muy bonita, Costa Rica me ha abierto las puertas a nivel personal y profesional.»
Para el pedalista colombiano, lo más duro los primeros meses fue estar lejos de su familia y acomodarse a las costumbres y el clima de Costa Rica, ya que venía de una zona muy fría.
De igual manera Diyer comenta la experiencia que ha obtenido participando en carreras extranjeras de buen nivel.
«Claramente uno se vuelve más profesional, el roce internacional, los corredores de mucho nivel y otras culturas le ayuda a uno demasiado; obviamente hay que ver y aprender de los demás.»
El ciclista colombiano además habló del 2019, año que perdió a su padre y que le hizo recapacitar muchas cosas en la vida personal y profesional.
«Fue un cambio bastante duro, bastante drástico y yo creo que me hizo recapacitar muchas cosas en mi vida, personales y profesionales; me hizo valorar cosas que uno y la gente no ve. Fue un hecho que le marcó la vida, lo enseñó a luchar duro por las cosas y cuidar el más mínimo detalle.
Por último Diyer habló de sus sueños y aspiraciones personales y profesionales.
«En la parte deportiva estoy muy cómodo, estoy muy bien gracias a mis patrocinadores y equipo pero tengo como objetivo dar protagonismo en la Vuelta a Costa Rica. En el ámbito personal dice estar bien y muy tranquilo”.