El Tour de Francia de 2017 para Warren Barguil fue inolvidable. Dos triunfos de etapa más el maillot de la montaña que le elevaron a la palestra del ciclismo mundial. Además, aquel año acabó octavo en la general. En 2019 fue décimo. Ahora, en 2020, tiene a Nairo Quintana de compañero de equipo.
El colombiano es el gran estandarte de un Arkea que quería soñar a lo grande en este Tour que ahora se encuentra en el aire. Se está barajando incluso que se celebre a puerta cerrada.
«Estos días he visto una de las jornadas en las que gané en 2017 en el Tour (12ª etapa) con final en Peyragudes. Había gente por todos los lados. Con esto, y tras ver aquella etapa, veo imposible que se disputa una edición del Tour de Francia a puerta cerrada. Cerrar los accesos y las entradas sólo es posible en un estadio. No podemos evitar la gente acuda a las cunetas», dice el corredor francés, que, en caso de que la organización se decida por esta opción, él lo tiene claro. «Prefiero que se aplace».
Además, el Tour, previsto del 27 de junio al 19 de julio, es la primera carrera que esperan disputar los corredores tras la crisis del coronavirus… con todo lo que ello conlleva. «Honestamente, no veo que se puedan celebrar otras carreras antes», dice Barguil en Ouest France. En 2020, Barguil solo ha competido en pruebas de su país y sin triunfos. Este pensamiento se une al de otro ilustre corredor del pais galo, Julian Alaphilippe.