El belga Greg Van Avermaet (BMC), nuevo líder del Tour de Francia, se mostró feliz por haber conseguido el maillot amarillo en una «prueba tan especial como una contrarreloj por equipos«, especialidad en la que el equipo estadounidense «es un maestro»
«Una contrarreloj por equipos siempre es algo especial. Todo el equipo hace un esfuerzo para lograr el objetivo de ganar la etapa y creo que nuestro equipo es un maestro. Estoy muy feliz de ser parte de ello», dijo en meta el campeón olímpico en ruta.
Para el clasicómano de Lokeren, de 33 años, es un gran honor vestirse de amarillo en el Tour de Francia, una experiencia que ya vivió en 2016, cuando se impuso en una etapa y estuvo de líder 3 días.
«Es un gran objetivo alcanzado ponerse de amarillo en la primera semana. Lo vestí una vez y recuerdo que fue una sensación increíble. He subido al podio a ponerme esa prenda por segunda vez y lo voy a disfrutar completamente mañana, es algo especial. Quiero agradecer a mis compañeros de equipo porque sin ellos no habría sucedido».
El maillot amarillo ha cambiado tres veces de manos en la tres primeras etapas, lo que tan solo ha sucedido en otra ocasión en los últimos 25 años, concretamente en 2015.