El colombiano del Movistar Team fue el más listo de la fuga, y superó en los últimos metros a Thibaut Pinot y Jefferson Cepeda, para lograr su primer triunfo en el Giro de Italia. Sin ataques entre los favoritos en una etapa recortada en kilómetros y dureza, Geraint Thomas sigue líder.
«Sabía que Pinot venía muy fuerte, y que Cepeda también estaba muy bien. ‘Solo’ tenía que dejarles a los dos, jugar mi estrategia, y por eso esperé al final«. Tirando de sangre fría e inteligencia, Einer Rubio superaba al sprint a sus dos compañeros de fuga, que habían gastado mucho más, para firmar en la cima de Crans Montana su segunda victoria profesional (tras la etapa del UAE Tour que lograra en febrero) y sin duda la más importante de su carrera. Una victoria que consagra al escalador colombiano, de 25 años, del Movistar Team.
La ha logrado en una 13ª etapa del Giro muy esperada pero que ha resultado descafeinada. Recortada esta mañana en kilometraje y dureza por las condiciones meteorológicas (de los 199 km previstos solo se han disputado los últimos 74,6, y los tres colosos montañosos que se debían superar quedaron en dos), los máximos favoritos no encontraron el momento o las fuerzas para atacar.
Solo Hugh Carthy y Lorenzo Fortunato se movieron en el pelotón, y con escaso rédito. Del top-10 nadie lo intentó. Otro día de combate nulo entre los aspirantes a ganar una corsa rosa que no termina de despegar. Otro día de decepción para los aficionados.
Geraint Thomas (INEOS) seguirá vistiendo la maglia rosa al encabezar una clasificación general que conserva intactos sus nueve primeros puestos. Primoz Roglic (Jumbo-Visma) sigue a 2″ y Joao Almeida (UAE) a 22. Décimo de la general se sitúa un Thibaut Pinot que buscó como nadie la victoria, y que tras rozarla se mostraba en la meta agotado y abatido. Al francés del Groupama-FDJ le queda el consuelo de vestirse con la maglia azzurra de líder de la Montaña, clasificación que pasa a encabezar con cuatro puntos de ventaja sobre Davide Bais (108 vs 104).