Once años después de la última victoria de un corredor de Luxemburgo en el Tour de Francia (Andy Schleck), Bob Junguels (AG2R Citroën Team) llegó desde la escapada para romper la racha con una demostración de insistencia, durabilidad y fe.
Porque hay que tener mucha confianza en uno mismo para atacar a más de 60 kilómetros de la meta, con un pelotón dominado por el UAE Team Emirates de Tadej Pogacar y por el Jumbo Visma de Jonas Vingegaard en su intento de controlar la carrera.
Además, Thibaut Pinot (Groupama FDJ), quien también andaba fugado, saltó en su persecución durante el Pas de Morgins (15.4km al 6.2%) y, aunque en un principio se acercó el luxemburgués, no tuvo arrestos para contactar con él.
Tanto es así que fue 4º, por detrás de Jonathan Castroviejo (2º, INEOS Grenadiers) y de Carlos Verona (3º, Movistar Team). Ambos españoles también se metieron en la escapada del día y dejaron, al igual que otros muchos, pasar un tren llamado Bob Jungels.
Hablando de trenes que se marchan, hay que mencionar al Jumbo Visma, y es que durante la ascensión final al Pas de Morgins (15.4km al 6.2%) contó con superioridad numérica y no movieron ni una uña.
Que Pogacar (UAE Team Emirates) es un marciano con unas piernas superiores al resto de los mortales es algo que se puede imaginar, pero si no se le prueba, no se le gana. El caso, que sigue a 39″s de Vingegaard (Jumbo Visma) y a 1’17″s de Thomas (INEOS).