Christian Prudhomme, director del Tour de Francia, ofreció una gran noticia a los aficionados. En edición de 2020, que arranca a finales de julio, podrá contar con la presencia de algunos aficionados aunque todavía no están claros cómo serán los protocolos.
«El público podrá venir. A finales de julio definiremos los filtros más o menos severos. No habrá besos en el podio y no será el mejor año para pedir autógrafos. En las montañas, favoreceremos a quienes suban a pie, en bicicleta o en el transporte establecido por las comunidades locales. Pero, repito, la situación está cambiando día a día. ¿Qué será en dos meses?», señala el dirigente, quien prefiere ser cauto a falta de dos meses para el inicio de la ronda gala.
La Vuelta a Burgos y el resto del calendario ciclista español reciben el visto bueno del CSD
Por otro lado, el Consejo Superior de Deportes (CSD) apoyará el retorno de las competiciones ciclistas en España siempre que se puedan «desarrollar en condiciones óptimas de seguridad sanitaria y hayan obtenido el visto bueno de Comunidades Autónomas y ayuntamientos», que son las autoridades que deben dar el visto bueno a su celebración tras el fin del Estado de Alarma.
Ese es el mensaje que ha trasladado el director general de Deportes, Joaquín de Arístegui, a Marcos Moral, director de la Vuelta a Burgos; Javier Guillén, director general de Unipublic y de LaVuelta; y José Luis López Cerrón, presidente de la Real Federación Española de Ciclismo, durante una reunión celebrada este miércoles en el Consejo Superior de Deportes en Madrid.
Ambas partes analizaron el programa de carreras ciclistas españolas e internacionales previstas en el calendario y establecieron «una colaboración reforzada para analizar las necesidades y exigencias que garanticen la celebración de estas pruebas profesionales con un carácter totalmente seguro desde el punto de vista sanitario».
La Vuelta a Burgos (28 julio – 1 agosto) será la primera competición ciclista internacional que se celebre en Europa y «demostrará la gran capacidad del deporte español, y en este caso del ciclismo, sus empresas y entidades, para organizar una prueba segura en el contexto de salida de la crisis sanitaria y retorno a la nueva normalidad», explicó Arístegui.
En la reunión también se tomó la decisión de que la Federación Española de Ciclismo y Unipublic se «incorporen a los trabajos que desarrolla el Grupo de Tareas para el Impulso del Deporte (GTID)», en el que se sientan otras federaciones deportivas, clubes, entidades privadas y deportistas para abordar con «éxito el retorno de las competiciones tras haber logrado la vuelta a los entrenamientos en condiciones seguras».