Marcos Moral, director de la Vuelta a Burgos, prueba UCI Pro Series encargada de reabrir el calendario del 28 de julio al 1 de agosto, perfila los detalles de la carrera, sobre todo los sanitarios, «con ilusión y mucha responsabilidad» para que la ronda burgalesa aglutine los focos del ciclismo mundial tras el parón por la pandemia del coronavirus.
Con la mano de la Diputación de Burgos, apostando en un momento económico y social delicado, habrá carrera si no se tuerce nada en el aspecto sanitario y la prueba recibe el permiso de las autoridades sanitarias, ahora con decisión de la Junta de Castilla y León y CSD.
Para cumplir un sueño que ha tardado en tomar forma, la Vuelta a Burgos ha propuesto un protocolo para cumplir con las normas que exigió la UCI el pasado viernes, las del Gobierno Autonómico y las del Estado por medio del CSD «al tratarse de una carrera internacional».
Marcos Moral, veterano organizador de la prueba, destaca que «la Vuelta a Burgos siempre establece un plan de riesgos laborales y de emergencias, pero este año se añade el de contingencias, con medidas preventivas por el Covid-19, un documento que estamos revisando por estará vivo hasta el momento de la carrera».
TRES PUNTOS DE PREVENCIÓN
El primer punto de prevención, explicó a EFE Marcos Moral, consiste en exigir a los equipos y corredores llegar con los controles del Covid-19 hechos.
«Los equipos deben venir con garantías y su médico debe controlarlo. Por su parte, la UCI debe demostrar que los comisarios y jurado técnico están limpios de coronavirus», dijo.
El segundo punto se refiere, indicó Moral, a «desplegar un sistema de aislamiento para las salidas y las llegadas. Los corredores irán al control de firmas con mascarilla».
Y en el tercero «consiste en tener en cuenta el control del aforo, las distancias de seguridad y la protección de las personas».
También comentó Marcos Moral que se van a suprimir algunos «puntos calientes», como la zona del avituallamiento, de manera que los corredores tendrán que desalojar los bidones de bebida en zonas concretas y evitar tirarlo en zonas donde habitualmente los aficionados se dedican a recogerlos.
EXPECTACIÓN MUNDIAL
La Vuelta a Burgos tendrá un seguimiento universal, por la novedad de la Vuelta a la competición y la gran demanda de equipos que quieren estar presentes. Más de 15 cadenas de TV, incluida TVE, llevarán las imágenes al mundo entero y ya son 36 equipos los que han solicitado competir en las carreteras burgalesas.
De las 36 solicitudes, la Vuelta a Burgos se ha quedado con 22, y para ello hubo una propuesta «solidaria» a los equipos para que pudiera estar esa cantidad de conjuntos.
«Solicitamos a los equipos renunciar a los fijos económicos y con ese dinero invitar a más equipos, pagándoles los hoteles. Lo que ahorrábamos por un lado lo invertimos en otro», explicó Moral.
«El criterio fue incluir primeros a los españoles, el segundo criterio la fidelidad de los conjuntos habituales y luego los del World Tour, que debían ser 14 por reglamento UCI», indicó.
De esta forma, los equipos españoles presentes en la Vuelta a Burgos serán: Movistar (World Tour), Caja Rural Seguros RGA, Burgos BH, Fundación Euskadi, Kern Pharma y Kometa Xstra Cycling Team.
Marcos Moral es consciente de que el mundo entero tendrá la vista puesta en la carrera que dirige tras el parón del coronavirus.
«Nos va a mirar todo el mundo, unos con ilusión, otros con ojos críticos, es una enorme responsabilidad, rezo todo lo que sé y les digo a todos los que saben que recen también», señaló el organizador tirando de humor.
Moral agradeció el apoyo de Unipublic, la empresa que organiza la Vuelta a España, y de TVE para poder poner en pie la carrera. «Es que otros también apoyan», precisó, «pero necesito algo más que una palmadita».
Nota Agencia EFE