Para todos los ciclistas, incluido Vincenzo Nibali, la temporada ha dado un giro radical hacia la esperanza. El anuncio de las nuevas fechas del Tour de Francia (29 de agosto al 20 de septiembre) supone un punto de partida ilusionante para salvar el curso de unos equipos y corredores que no han dejado de prepararse como buenamente han podido.
No obstante, los entrenamientos, la mayoría sobre rodillos, no son comparables a los de una planificación normal, por lo que ‘El Tiburón’ considera que la próxima edición de la Grande Boucle va a estar repleta de sorpresas. «Será un recorrido interesante también desde este punto de vista, un Tour con sorpresas. Depende de cómo reaccionen los físicos, tal vez te pongas en buena condición desde la tercera etapa y quien haya ido lentamente antes cambie su ritmo. En una carrera por etapas tienes que ser lo más regular posible», explicó el italiano en su cuenta de Facebook.
Pese a que el Tour centrará todas las miradas del ciclismo en 2020, en caso de que se celebre con cierta normalidad, el gran objetivo de Nibali para este año pasa por el Giro de Italia, lo que será sin duda una de sus últimas participaciones ya que se encuentra en el tramo final de su carrera deportiva. «El Giro en octubre cambiará mucho nuestras expectativas, tal vez en las montañas podríamos encontrar nieve, y probablemente habrá mucha lluvia. También hablé con Mauro Vegni (el director de RCS Sport) y todavía no sabemos cómo se gestionará. Ni siquiera sabemos la salida, si es de Hungría o si será completamente siciliana», concluyó Il Scualo.