Aceptando tan solo cinco preguntas en la conferencia de prensa del Alto de los Machucos, Primoz Roglic confesó que “no esperaba” sacar tantas diferencias con sus rivales. El esloveno del Jumbo-Visma logró una diferencia de 27’’ con Alejandro Valverde y Nairo Quintana, y 1’01’’ con Miguel Ángel López. “Esperaba más batalla en el final”, confesó, “pero ha sido un buen final para mi”.
Parco en palabras y poco expresivo como acostumbra, Roglic aseguró respecto al golpe moral a sus rivales y el tiempo que ha sacado, que “las dos cosas son importantes pero el tiempo es lo que cuenta en el ciclismo, y es bueno haber cogido más”.
También dijo que “me gustan todo tipo de subidas”. Tanto las cortas y explosivas como los Machucos o los puertos más largos como los que llegan este fin de semana en Asturias. “Si eres un buen corredor no tienes problema con ningún puerto”, zanjó.
Preguntado si había pactado con Pogacar que el triunfo de etapa fuese para el del UAE Emirates, no quiso desvelarlo pero añadió “solo puedo decir que es bonito para el ciclismo esloveno tener a dos corredores al frente de esta etapa. Los dos hemos dado el máximo para llegar hasta final”. Sobre la joven perla dijo que “es un gran talento y forma parte del futuro de este deporte. Está cada vez más cerca en la general de las posiciones de podio. Es un buen amigo y un gran rival”.