El ciclista costarricense Andrey Amador quien corre con el Movistar, terminó la etapa seis de la Vuelta España, en el grupo principal y esto le valió para seguir escalando posiciones, ya que subió nueves escalones.
El «rebelde» Nacer Bouhanni (Cofidis) se sacó la espina de la aciaga jornada de ayer, en la que llegó el último y fue sancionado tras un incidente no del todo aclarado con su director y con el coche del equipo. En la mañana de hoy se defendía diciendo que las cosas no habían pasado como algunos contaban: «¿Por qué tratar de mostrarme como el chico malo que no soy?», añadía.
Pero el día ha acabado de la mejor manera posible para el esprinter francés de 28 años, quien se ha impuesto en San Javier en una etapa extraña, marcada por el viento, los consiguientes abanicos, una caída y alguna avería que han terminado por cortar el pelotón en mil pedazos y que ha dejado como grandes damnificados a Thibaut Pinot y Wilco Kelderman, dos favoritos al podio que han perdido en meta 1´44” y, con ello, casi todas sus opciones en la general. Una general que sigue encabezada por Rudy Molard, seguido de Michal Kwiatkowski y Emanuel Buchmann.
Así, a la meta de San Javier llegó por delante un grupo de sólo 50 ciclistas que se jugaron la victoria al esprint. Un esprint extraño en el que el gran favorito, Elia Viviani, llegó mal colocado (muy retrasado y encerrado) y pese a una espectacular remontada no pudo más que ser tercero. Bouhanni fue el más rápido batiendo en un cerrado final a Danny Van Poppel. Es la 3ª victoria del francés de Cofidis en la Vuelta (tras las dos que consiguiera en 2014), su sexta de la temporada (primera World Tour) y su triunfo número 66 como profesional.
Los últimos 20 km fueron una lucha entre el grupo de cabeza (con casi todos los esprinters y favoritos a la general) y los grupos en los que marchaban Pinot y Kelderman, que finalmente se unieron. El viento, una caída y una avería mecánica. Todo en un estrecho margen de tiempo. La tormenta perfecta que convirtió una etapa a priori de transición en una etapa trampa que pilló a Pinot, Kelderman y Majka. Tres víctimas ilustres de una Vuelta a España que no da tregua.
A reseñar que la fuga del día –que se formó en el primer kilómetro- estuvo protagonizada por el australiano Richie Porte (BMC), por el incansable Luis Ángel Maté (Cofidis), líder de la montaña y un día más escapado, y por el cordobés Jorge Cubero (Burgos-BH), el que fuera el primer corredor en tomar la salida en la crono inicial en Málaga. Fue una escapada controlada en todo momento por los equipos de los esprinters y que finalizó a 30 km de meta.
Por su parte el tico Amador cruzó la meta en la casilla 46 con el mismo tiempo del ganador Bouhanni y en la general, escaló del puesto 80, al 71 con un retraso de 18:52, con respecto la líder Rudy Molard que acumula 22:26:15
Mañana viernes, 7ª etapa (Puerto Lumbreras-Pozo Alcón, de 187,5 km) con otra previsible llegada al esprint. Los ciclistas deben superar dos puertos de 3ª, el último de ellos, el Alto de Ceal, a tan sólo 13 kilómetros de meta, lo que puede provocará que algunos pierdan contacto con el pelotón, pero que no debería impedir una llegada masiva en la localidad jienense de Pozo Alcón.