El escándalo de dopaje institucional organizado por el estado ruso entre finales de 2011 y agosto de 2015 que ha provocado la exclusión de todos los atletas soviéticos clasificados para participar en los Juegos Olímpicos de Río va a tener también repercusión en el ciclismo, al igual que ha sucedido en el remo, natación, halterofilia y piragüismo.
El Comité Olímpico Internacional, que tomó la decisión de prohibir la participación en Río de todos los deportistas rusos implicados en el Informe McLaren, que ha investigado las prácticas de dopaje organizadas por el ministerio de deportes soviético, ha determinado que todos los deportistas de esta nacionalidad que hayan sido sancionados por dopaje en algún momento de su trayectoria profesional serán vetados en los próximos Juegos Olímpicos. Por tanto, Ilnur Zakarin, la emergente estrella del Katusha y reciente vencedor de etapa en el Tour de Francia, no podrá tomar parte en la prueba en ruta y contrarreloj pues en 2009, cuando apenas tenía 20 años, dio positivo por metandienona.
Zakarin, que intuía que tomarían esta decisión, ha intentado tomar parte en los Juegos como deportista independiente, circunstancia a la que ya se han acogido con éxito otros atletas de su nacionalidad, pero esta opción ha fracasado y ayer mismo le comunicaron que esta fuera del equipo olímpico ruso. “Recibimos la llamado de Moscú anoche”, ha explicado Gumar Zakarievich, entrenador de Zakarin a CyclingNews, mientras su pupilo se encuentra concentrado antes de tomar parte mañana en la Clásica de San Sebastián.
En igual circunstancia que el corredor del Katusha se han visto Olga Zabelinskaya, ciclista de carretera, y Sergei Shilov, perteneciente al equipo de pista que tampoco podrán estar en Río por sanciones pasadas.