El colombiano había rozado la victoria en los embalajes de Tarragona y Oliva.
La duodécima etapa de la Vuelta a España transcurrió entre Ólvega y Zaragoza en un ambiente de tregua, justo antes de la temida etapa trece. Panorama que fue aprovechado por el neerlandés Jetse Bol (Burgos-BH) y el local Abel Balderstone (Caja Rural-Seguros RGA) apostando por la fuga durante más de 100 kilómetros, con 2 minutos y 15 segundos como máxima diferencia frente al grupo líder.
Entre tanto, el pelotón conducido por Alpecin-Deceuninck se encargaba de proteger los intereses de su candidato Kaden Groves con la tercera victoria de la presente edición en la mente.
Los últimos 50 kilómetros transcurrieron bajo la aceleración del lote yendo por el dúo de punta y neutralizándolo seis kilómetros después, aunque Jetse Bol (Burgos-BH) aún mostraba ganas y volvía a tomar distancia, haciéndose merecedor de la mención como el más combativo de la etapa.
El sprint bonificado volvía a revolucionar al lota pasando por Villanueva de Gállego, en el que el propio Primoz Roglic (Jumbo-Visma) luchaba frente a Kaden Groves (Alpecin-Deceuninck) por el primer lugar. Pero el australiano imponía su potencia ratificando el dominio sobre la camiseta verde.
En medio de la tensión el lote llegaba compacto al embalaje final con el tren el Alpecin-Deceuninck comandando las acciones y los demás velocistas abriéndose un espacio siguiendo la estela del equipo neerlandés. Pero la probable victoria para Groves se veía opacada por el increíble lanzamiento de Rui Oliveira (UAE Team Emirates) dejando en la mejor perspectiva posible a su compañero Juan Sebastián Molano quien concretaba el triunfo en la recta final, mientras que su archirrival golpeaba el manubrio cruzando la línea de sentencia por no alcanzar el objetivo.
El colombiano festejaba a rabiar el triunfo que se le había escapado en dos etapas anteriores, en medio de las escasas posibilidades para los velocistas en esta Vuelta a España, sumando la segunda victoria de por vida en la ronda ibérica y la número 38 en el historial de Colombia en la competencia.
La Vuelta a España continúa este viernes con una etapa cinco estrellas que acumulará 4.000 metros de desnivel positivo con los ascensos a Portalet, Col d’Aubisque, Col de Spandelles y el Col du Tourmalet. Serán 134,7 kilómetros de batalla entre los favoritos a la clasificación general.
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