Desolación, rabia y tristeza tras la partida del Team Colombia

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En los últimos días el ciclismo latinoamericano y mundial ha sido sacudido por el adiós del Team Colombia, un proyecto, el cual nació con mucha ilusión en el país cafetero de la mano de Jairo Clopatosky director del Instituto Colombiano de Deportes (Coldeportes) y que terminó con desolación, rabia y tristeza debido a las penurias vividas por algunos de los ciclistas durante estos 4 años, historia que fue recopilada por la periodista Georgina Ruiz Sandoval.

Los ciclistas del Team Colombia han sido ultrajados – por no decir que violados – por una estructura que hizo  y deshizo derrochando 3 millones de euros anuales – desde el 2012 -, para pagar los beneficios de Corti y sus amigos pasando por encima de las condiciones básicas de todo ser humano.

“El cuerpo directivo nos trató despectivamente, en sus ojos todos éramos indios. Sí, yo creo que racismo es una palabra que acompañó sus actitudes para con nosotros. Exigir cosas normales como el tipo de alimento que nos daban en carrera era una ofensa mayor. En general contrariar de cualquier forma a los directores era ponernos la cruz encima. Uno no podía acercarse a Claudio con alguna situación porque salía regañado, con un lenguaje que terminaba por tirarnos en el piso”, fueron las palabras de uno de los ciclistas, en la versión recopilada por Ruiz Sandoval, periodista de ESPN.

Varios exabruptos han marcado la era del Team Colombia entre ellos el atraso de salarios a sus corredores, situación que el año pasado fue denunciada por el vallecaucano Jarlinson Pantano que hoy corre para el equipo suizo IAM Cycling y Robinson Chalapud ciclista que paso a engrosar las filas del orgullo antioqueño para convertirse en el campeón nacional colombiano.

“Que mal que se acabe un equipo Team Colombia, todo por un mal manejo de sus directores italianos que solo les importaba el dinero“, reacción de enojo del conocido “Chala”, que también disparó contra Corti y su pandilla en Twitter.

Panorama bastante delicado el que afrontaron los ciclistas del Team Colombia los cuales mostraron ráfagas de su talento en estas cuatro temporadas, pero ¿cómo se le puede exigir a un equipo desmotivado y sin salario?, ¿Qué motivación puede tener un ciclista si no recibe salario y tiene que mantener a su familia, además de sobrevivir en esas condiciones?, o ¿Quién trabajaría con ganas y esfuerzo para una empresa si no recibe su salario a tiempo?

La falta de técnicos a la altura de una de las potencias mundiales en el ciclismo fue otro de los detonantes de este proyecto que en las ultimas participaciones solo jugó a meterse en las fugas para tratar de llegar a la victoria que le fue esquiva en este último año al Rodolfo Torres, líder del equipo en el 2015, el cual trato de alcanzar  la victoria de etapa en el Tour de San Luis, el Giro de Trentino y estuvo cerca de conseguirlo en la vuelta a España.

Historia parecida en el 2014 con Jarlinson Pantano que estuvo cerca de llevarse la victoria en el Giro de Italia en la etapa con final en el Santuario de Oropa y Fabio Duarte que rozó la victoria en Montecampione llegando por detrás de Fabio Aru (Astana), y posteriormente en Panarrota arribando detrás del colombiano Julián Arredondo (Trek).

En resumen los triunfos fueron limitados, 6 en el 2012, 3 victorias en el 2013 y 2014, y ninguna victoria en el 2015, lo que podría llevar a dos teorías, los ciclistas no tienen el talento necesario o los técnicos no sirven para nada.

Sin embargo, la primera de las teorías se cae porque tanto Torres en 2015, Duarte en los años anteriores y Daniel Martínez (una de las joyas del ciclismo colombiano con tan solo 19 años) han demostrado que el talento lo tienen, pero han sido mal administrados por dos “técnicos” italianos incapaces como Valerio Tebaldi y Oscar Pelliciolli.

“Como algunos nos quejábamos nos mandaron a las competencias más malucas, a unas en las que nuestro perfil no encajaba para hacer algo. Yo no sé cómo escogían las nóminas, muchos pensábamos que lo hacían “a dedazo” o de acuerdo a cómo le cayéramos a los directores”, otro relato de las recopilaciones de Georgina Ruiz Sandoval.

Entonces apuntamos a que los técnicos no tienen la experiencia necesaria para hacer una lectura de carrera o para planificar un giro de Italia o vuelta a España milimétricamente, haciendo reconocimientos previos como lo dictan los cánones o el manual de los grandes atletas y cuyo video en el Diario AS durante la vuelta a España nos corrobora su nefasta estrategia en las carreras y la cara de amargura de los ciclistas de esta escuadra.

Además de las pifias en las nominas, cuyos recorridos en algunas carreras de recorrido plano fueron cubiertos por varios escaladores, o viceversa, carreras con dificultad montañosa y con una nómina de rodadores, factores que dieron al traste y con presentaciones regulares.

Sin embargo, no son los únicos puntos a enumerar, además de la falta de salario y motivación, malos tratos y escasa preparación en la estrategia de carrera, esta un negocio millonario de 3 millones de euros anuales, conducido por su manager Claudio Corti, que lo señalan como el responsable de esta debacle que sufre el ciclismo colombiano.

El italiano Claudio Corti manejo el dinero contratando un staff netamente italiano, al cual nunca le hizo falta el salario, y hasta le alcanzó para poner a correr a su hijo Marco Corti por allá en el 2013, situación que fue atacada por la afición ciclística colombiana e isofacto relevado para bajarle el tono a la discusión y endosándolo como parte del cuerpo técnico.

Se habla de desvío de dineros pero aun no se ha comprobado nada, también de beneficios de marcas de la bicicleta oficial del Team Colombia, la Willier Trestina, que fue pagada con dinero colombiano, pero que serian solicitadas por Claudio Corti el día lunes a primera hora después de terminar la temporada 2015.

También se mencionan las disputas políticas que de la mano de Andrés Botero, Ministro de Deportes, anunció el recorte de presupuesto en un 50% para el equipo Team Colombia, dinero limitado para seguir una temporada más, además del enfrentamiento de 2 grupos por adjudicarse los derechos de formación de Nairo Quintana, Esteban Chaves, Sergio Henao, Darwin Atapuma, Jarlinson Pantano, entre otros, que hicieron parte de la estructura Colombia es Pasión liderada por Luisa Fernanda Ríos y Luis Fernando Saldarriaga.

Sabemos que los inicios de Nairo Quintana se dieron de la mano de Boyacá es para Vivirla en el 2009, con Vicente Belda que lo llevo a correr a España el circuito montañés, la clásica de ordizia, entre otros y que luego pasaría al Colombia es Pasión representando la marca país, la cual recibía dineros del  gobierno colombiano y donde ganó el Tour del Avennir que lo catapultaría como un ciclista para ser líder de una escuadra como el Movistar español.

Mientras Claudio Corti se adjudica los derechos de Pantano, Chaves y Atapuma, ciclistas que ya habían llegado con un largo recorrido de varios años por Europa, militando en las filas del Colombia es Pasión y que dieron su salto a equipos World Tour.

Desolación es la palabra para enmarcar esta historia del ciclismo latinoamericano que deja a 18 ciclistas sin trabajo, algunos de ellos se marcharan a escuadras europeas, otros como Juan Pablo Valencia reclama su falta de comunicación para informarles con anticipación de la terminación del proyecto.

Aun queda mucha tela para cortar y podríamos escribir hasta mil páginas de las situaciones vividas por los corredores del Team Colombia, esperamos que esto sirva como reflejo y ejemplo para que en Costa Rica y Latinoamérica no se repitan estos nefastos actos de injusticias con los deportistas que llevan el nombre de nuestra bandera.

Este tema aun no ha terminado porque los ofendidos no han hablado por temor a represalias y en espera a recibir el salario de estos últimos 4 meses, pero progresivamente saldrá a la luz cada una de las arbitrariedades cometidas por Claudio Corti y sus secuaces.